Mi refugio...

Todo el mundo  tiene problemas, algunos de amor, otros de dinero, muchos de trabajo  y otros tantos de salud... generalmente  cuando una persona tiene un problema crea un refugio donde nada le puede hacer daño, donde nada le puede afectar, donde queda aislado del mundo exterior de tal forma que deja de interactuar con el… estoy hablando de la mente, si aquel poderoso refugio donde todo se puede hacer realidad, desde la más mínima cosa hasta la más compleja. Pero... ¿qué pasa cuando nuestra propia mente está plagada de problemas? ¿Cuándo el simple hecho de pensar se nos hace un problema? ¿Cuándo un simple  recuerdo nos convierte en la más miserable de las personas? Vamos cayendo  al suelo lentamente viendo como todo el mundo se nos viene encima y es entonces cuando pensamos que ya no podemos  hacer nada, que  no podremos seguir adelante porque todo se viene abajo y lo peor no es que lo pensemos es que también nos lo hacen pensar, nos pisan día tras día haciéndonos creer lo poco  que valen nuestras vidas y lo miserables que son... Un día llamaste a la puerta de mi mente diciéndome que habías cambiado que ahora todo sería diferente yo  ingenuo te deje entrar  pensando en que todo lo que me decías era cierto; todo parecía muy bonito pero en solo una semana  he tenido que soportar un intento de suicidio, que estuvieses con otro y encima que me dejases tirado como un simple perro. Eso no es lo peor , ya que  al abrirte la puerta de mi refugio ahora ya no lo es  y el simple hecho de que no tenga ningún sitio donde refugiarme me va matando poco a poco ,  lentamente  y lo único que quiero hacer es aislarme , alejarme despacio de lo que un día fue mi lugar preferido…

Shail.